El Warrior en acción
También el Rainbow Warrior estuvo atareado durante 1982. Ahora tenía un nuevo capitán, Peter Willcox, un norteamericano de 28 años. En enero y febrero, el Warrior estuvo en acción en la costa oriental de los Estados Unidos, primero en una serie de enfrentamientos con NL Industries, una empresa multinacional que llevaba años vertiendo casi 4.5 millones de litros diarios de residuos férricos ácidos en un punto situado a 15 millas (24 km) de la costa de Nueva Jersey.
Nuevas fronteras, 2da Parte
Mientras avanzaban estas maquinaciones internacionales, Greenpeace lanzaba la segunda fase de la operación, durante la cual el Sirius trató de evitar al barco holandés Scheldebor el lanzamiento de una carga de 3.000 toneladas de residuos nucleares. Los botes neumáticos se mantuvieron en movimiento bajo las plataformas de vertido hasta que dos barriles alcanzaron a uno de ellos y lanzaron a su tripulación al agua. Los marineros del Scheldebor pidieron disculpas por el incidente e interrumpieron el vertido por
El juego del ratón y el gato
El 19 de marzo de 1981, el Rainbow Warrior llegó a las proximidades de la costa oriental de Canadá para tomar parte en la protesta contra la muerte de 15.000 cachorros de focas de casco. Seis días más tarde, después de jugar al ratón y al gato con el MV Baffin, un barco de protección de las pesquerías canadienses, fue remolcado fuera de la zona sin más ceremonias y el organizador de la campaña, Allan Thornton, fue detenido.
En persecución de los balleneros
Tras una búsqueda infructuosa por las costas de Corcubión, donde se encontraba una de las estaciones balleneras. El Warrior volvió de nuevo hacia Vigo, donde la tripulación avistó un ballenero, el Ibsa III. En un instante, las Zodiacs neumáticas estaban en el agua y maniobrando en torno al barco. Greenpeace logró impedir las capturas tan eficazmente, que apareció para interrumpir la protesta la corbeta Cadarso, a la que pronto se unió la Pinzón, con órdenes de detener al
Mares turbulentos
DURANTE EL ÚLTIMO AÑO de la década, las cada vez más diversas campañas de Greenpeace atrajeron a un número creciente de partidarios. Pero el éxito estuvo a punto de resultar fatal. «No hubo crecimiento sistemático», comenta John Frizell, que se incorporó a la campaña de la ballena en 1976 y se convirtió más tarde en director ejecutivo de Greenpeace. «El barco llegaba a un sitio, San Francisco, por ejemplo, y allí se fundaba una oficina. A continuación alguien
La primera confrontación, 3ra Parte
El Rainbow Warrior se pegó a la popa del Quittungen, que llevaba a las Orcadas a seis expertos cazadores noruegos. Les seguían tres barcos cargados de periodistas, además de algunos aviones y helicópteros, también con enviados de prensa, que sobrevolaban la zona. No hubo más que un enfrentamiento en el mar, que empezó cerca de Scapa Flow, puerto tradicional de la Royal Navy en tiempo de guerra. En cuanto los noruegos aparecían por algún sitio, las lanchas hinchables
La primera confrontación, 2da Parte
El Ohana Kai llevaba a bordo un equipo de la ABC-TV formado por nueve miembros y un helicóptero, aunque las mejores escenas las tomaron los cámaras de Greenpeace desde James Bay. La película del viaje y la carnicería de los cachalotes se difundió por todo el país, y el presidente Carter manifestó su especial interés en verla. En julio de 1977 se celebró en Canberra, Australia, la conferencia anual de la IWC, que sirvió de fondo a las
La primera confrontación
El barco en cuestión era el Hvalur 9, que evoluciona lentamente mientras buscaba ballenas. Súbitamente, a unos cientos de metros, apareció un banco de cetáceos, y el barco viró con decisión hacia su objetivo. Greenpeace entró en acción lanzando cuatro pequeñas lanchas hinchables que salieron disparadas para interponerse entre las ballenas y el ballenero. Allan Thornton describe la escena: Nos acercamos al cazador Número 9 hacia las 8 de la mañana. A esa hora había mar moderadamente gruesa,